Entrevista a Althay Páez
Althay Páez nace en Fuerteventura. Su primer instrumento lo tocó con tres años y fue una lata de galletas. Su afán por la música le llevaba a estar todo el día buscando trastos que produjeran sonidos. Hasta una mesa le servía para sacar compases a pesar de que su abuela le amenazaba con que estaba llamando al diablo. Al final, el diablo nunca llegó, pero sí maestros como Esteban Ramírez, hijo del histórico folclorista, que le fueron dando las primeras instrucciones en el mundo de la música. Tocó clarinete, piano, recibió clases de solfeo…, pero “mi chiquillo desde los cuatro años siempre fue el timple”. Y ese hijo se hizo mayor y empezó a recorrer junto a Althay escenarios de medio mundo. Ha trabajado junto a Mestisay, Domingo Rodríguez el Colorao, Taburiente, José Manuel Ramos… Asegura que vive gracias a la música, “pero no lo considero un trabajo”.